De los hombres, sus deseos, el tiempo y las cosas.

Cero horas, un hombre duda sobre como debe estar la almohada para un dormir placentero. El hombre logra dormir y despierta con la almohada en la entrepierna. Se excita pensado que es la hermosa mujer rubia de la primera fila enredada en su sotana.

Siete horas después, una solterona y virgen mujer se enamora .Besa un monitor brillante anhelando conocer a aquel hombre fortachón y sensible que habitaba la pantalla. A 957 km de distancia del monitor babeado, dos pendejos de 14 años se cagan de risa de la gorda avergonzada en la foto.

Luego de tres días, durante la mañana en la ruta, Raúl el camionero, recordó el sueño que tuvo durante la noche: el era de nuevo un niño y cumplía el deseo de ser bailarín del colon .Se sintió abrumado y decidió gritar con lagrimas en los ojos ¡soy puto , soy puto! Pero el ruido del camión y de los autos en la ruta hicieron de su grito menos que un susurro. Se avergonzó y volvió a callar recordando la cara de su padre.


Una semana y siete horas después, Sergio de 12 años de edad tiene por primera vez relaciones sexuales .El niño tiene el orgasmo, busca el cuchillo, apuñala y le roba a la prostituta rubia que solía sentarse en la primera fila de la iglesia del padre Juan. Cae y gira una moneda en el rancho de Sergio, él y sus siete hermanitos cuentan con risas 33 segundos hasta que la moneda se detiene, en ese preciso instante de quietud, se desploma una lágrima que recorre la mejilla abultada de una mujer virgen y enamorada , avergonzada en una foto.